Haber la igualdad y proporción de los hechos con la caja de escritura de los terribles sucesos que nosè si decirlos o no; es algo que quizás no tenga punto de intersección como las líneas de subtes, energías, drogas y colectivos de los dibujos que en algunos juegos sirven para cualquier lance favorable.
Es decir lo que hace unos días podía sentirse con mucho atractivo y simpatía reluciendo en el podio, a la altura de las circunstancias y sobre el largo pedestal, puede tambièn convertirse en un autodio que viaja a la velocidad de la luz, por lo que esta incógnita se dirige de cualquier modo a su reunión de miembros escogidos en una asamblea para examinar ciertos asuntos de la comediògrafa aquí escribiente, y es entonces cuando este astro errante que en la curva excéntrica acompaña al dolor que la ausente dientista ha provocado, da origen y color a las falsedades de la persona inventora de los sentidos que comprenden al sexo opuesto.
He dicho que las aventuras de mi cadáver exangüe, levemente retorcidas son las primicias de este año repleto de signos ortográficos que se ponen al principio y fin de las citas. Mis holodramas como medidas de seguridad extremas bailan afines y jocosos, destruyen todo rastro de buena voluntad hacia el amor propio, las cuestiones pertenecientes al ruido del folklore tienen génesis en aquella boca desconocida MINÚSCULA, cuando la mía ornamentada y con sus moléculas alteradas solo pueden decir que la comparación es un medio de destrucción gratuito.